El ministro de Trabajo e Inmigración, Valeriano Gómez, insistió hoy en que alargar la edad legal de jubilación es la mejor garantía para garantizar el futuro de las pensiones y descartó otras medidas como el aumento de las cotizaciones sociales o la reducción de las prestaciones.
Durante su primera comparecencia en la comisión no permanente del Pacto de Toledo, Gómez dijo que para el Gobierno una "reforma de calado" del sistema de Seguridad Social es una "cuestión de Estado" y que como tal debe contar con el máximo apoyo.
Por ello, apeló a la responsabilidad de los diputados y les pidió que aparquen sus diferencias y que trabajen juntos por lograr un acuerdo en las próximas semanas porque, según dijo, "es lo que necesita nuestro país y es lo que desean los ciudadanos".
En este sentido, señaló que "nunca antes tantas miradas, dentro y fuera de nuestras fronteras, se habían dirigido al Pacto de Toledo" y reiteró que la reforma de las pensiones es "imprescindible e inaplazable".
Para Gómez, una permanencia mayor en el mercado de trabajo es la "mejor garantía" para el equilibrio del sistema en el futuro, por ello consideró "imprescindible" reducir las prejubilaciones y las jubilaciones anticipadas, ampliar la población activa y prolongar la vida laboral.