Los vecinos de una urbanización de Parla sufren okupaciones desde 2016 y ahora las familias que todavía pagan alquiler han llegado al límite: "Los garajes se incendiaron y siguen calcinados y cerrados, los portales están destrozados, roban hasta los telefonillos, todo lleno de grafitis y hay tráfico de droga", denuncian.
Alegan que allí actúan desde hace tiempo varias mafias de la okupación que presuntamente quemaron los vehículos incendiando los garajes y que usurpan pisos para ofrecérselos a okupas.
El edificio pertenece a la Sareb y desde esa sociedad gestora defienden que unos 115 inquilinos pagan la mensualidad a día de hoy. Sin embargo, las vecinas declaran que hay unas 20 personas con contrato y todo en orden: "Si vienes por la tarde o de noche tienes mucho miedo por los portales y los garajes, no sabes qué vas a encontrar", declara una vecina.
Las inmediaciones de la urbanización están llenas de basura y de ladrillos y objetos rotos: "Esto es un peligro, yo no voy en ascensor porque siempre está roto y tengo miedo", confiesa otra inquilina.