Rusia bombardea de nuevo puertos Odesa y almacenes de grano
Putin continúa atacando los puertos de Odesa y los almacenes de grano en su particular cruzada para asfixiar la economía global y forzar así a Ucrania
Foto: Redacción |Vídeo: Telemadrid
Redacción / EFE
Rusia atacó anoche las regiones del sur de Ucrania de Odesa y Mikoláyiv con un total de 19 misiles de crucero dirigidos contra “puertos, muelles, viviendas y empresas”, informó hoy la Fuerza Aérea ucraniana.
Se trata de la tercera noche consecutiva en la que Rusia ataca instalaciones portuarias del sur de Ucrania, después de que el lunes Moscú anunciara su retirada del acuerdo del grano, por el que se comprometía a permitir la salida de cereal ucraniano por el Mar Negro y a no atacar infraestructuras relacionadas con la producción y la exportación agrícola.
Anoche "los ocupantes de nuevo han atacado la región sur de Ucrania”, se lee en el parte de la Fuerza Aérea.
“Esta vez Odesa y Mikoláyiv han sido los objetivos de los misiles”, añade la nota en relación con esas regiones ucranianas.
El ataque ha provocado más de veinte heridos en ambas regiones, donde los misiles han dañado o destruido varios edificios. Por el momento no se conocen los daños causados en las infraestructuras portuarias.
Además de los 19 misiles, Rusia lanzó anoche contra territorio ucraniano 19 drones kamikaze Shahed, según este componente del ejército, cuyas defensas aéreas lograron interceptar 5 misiles y 13 drones.
Zelenski responde a los ataques
En su discurso de anoche a la nación, el presidente Volodímir Zelenski pidió a los aliados de Ucrania más sistemas antiaéreos para poder proteger sus ciudades y sus puertos, que se han convertido esta semana en nuevo objetivo prioritario de los bombardeos rusos.
El ataque con misiles de la madrugada del miércoles destruyó varios silos en el puerto de Chornomorsk de la región de Odesa, uno de los tres puertos del Mar Negro por los que Ucrania exportaba cereal en virtud del acuerdo que el lunes dio por terminado Rusia.
Unas 60.000 toneladas que debían ser exportadas a China se perdieron como consecuencia del ataque, que provocó daños en el puerto que tardarán en repararse alrededor de un año, según la empresa Kernel, propietaria de la infraestructura dañada.