El francés Karim Benzema entrenó este jueves en solitario sobre el césped de la Ciudad Deportiva Real Madrid para seguir midiendo sus sensaciones de las molestias musculares que arrastra desde el pasado domingo, cuando dejó el terreno de juego frente a la Real Sociedad, que le impidieron jugar contra el Inter en Liga de Campeones y que ponen en duda su presencia este domingo (21.000 horas) en el derbi frente al Atlético de Madrid.
El delantero, pieza clave para el italiano Carlo Ancelotti por sus 17 goles y 8 asistencias en lo que llevamos de temporada, entrenó el miércoles, en el día libre para la plantilla, en el gimnasio y realizó sesión de fisioterapia.
Según pudo saber Efe de fuentes del club, este viernes o incluso el sábado se tomará la decisión de si podrá estar en el derbi según las pruebas y sensaciones que tenga Benzema de las molestias en los isquiotibiales de la pierna izquierda.
El que sí pudo volver fue el galés Gareth Bale. El extremo no juega un partido con el Real Madrid desde el 28 de agosto, día en el que fue titular por tercer encuentro consecutivo, pero ahí volvieron a aparecer sus fantasmas del pasado.
Ancelotti le dio confianza, pero Bale cayó de nuevo en las lesiones y en priorizar su selección. El 13 de noviembre, el galés volvió a jugar más de dos meses después de sufrir una rotura en los isquiotibiales. Y lo hizo con su país a pesar de no tener el alta médica en el último partido del Real Madrid antes del dicho parón internacional.
Disputó los primeros 45 minutos en la goleada frente a Bielorrusia (5-1), dando la asistencia del segundo tanto y quedándose en el banquillo para la segunda mitad ya con 2-0 en el marcador.
Tres días más tarde trascendieron molestias en un gemelo que le han tenido apartado de los terrenos de juego casi otro mes. Este jueves participó con el resto de sus compañeros en el entrenamiento y si no hay contratiempo podría entrar en la convocatoria para el derbi.
Una lista en la que no estará Dani Ceballos, quien ultima el proceso de recuperación de la lesión que sufrió en el tobillo durante el debut de España en los Juegos Olímpicos de Tokio, que finalizó con medalla de plata, el pasado 22 de julio. El centrocampista tocó balón e hizo trabajo específico sobre el césped.
Por su parte, David Alaba siguió trabajando con un vendaje en la rodilla izquierda, por los problemas que arrastra desde que el pasado 24 de noviembre sufriera un ligero esguince en dicha articulación frente al Sheriff.
Sin embargo, desde entonces ha disputado los 90 minutos en los cuatro partidos del Real Madrid y volverá a ser de la partida contra el Atlético, comandando la defensa a pesar de ser un recién llegado junto al brasileño Éder Militao.