Iván Lara sufrió una fractura de tibia y peroné en un partido de pretemporada, con el Ciudad de los Ángeles, días antes de cumplir su mayoría de edad.
"Salté con la pierna derecha para no tocar el balón para que pasara por encima del portero, dejé la pierna izquierda apoyada en el suelo, pero el portero salió con las piernas en forma de v, chocó contra mí y me vi con la pierna colgando. Hasta que llegó la ambulancia fue un momento muy duro", recuerda Iván.
Su madre, Blanco Gómez, echa la mirada atrás: "Salí corriendo al hospital 12 de octubre, llegué incluso antes de que la ambulancia, fue duro cuando llegó". Su padre, José Manuel Lara, recuerda que su Iván le dijo que "es el fin del fútbol".
Una fractura que ha minado la ilusión de un chico que disfruta de jugar al fútbol. "Tenía tiendo antes de la operación y de que vuelva a pasar, constantemente me viene ese recuerdo del impacto con el portero".
Ese miedo ha desaparecido con el paso de los días y las dedicatorias de Sergio Ramos, Eden Hazard y Zinedine Zidane son el primer paso para su recuperación.
"Estoy impactado, todavía no me creo que me haya firmado Sergio Ramos, que es el capitán del Real Madrid y mi ídolo; o Hazard, que es el mejor fichaje que ha hecho el Madrid este verano; o Zidane, que es para mí un orgullo", confiesa Iván.
El joven futbolista ya solo piensa en volver a ser feliz en un campo de fútbol con el balón en los pies: "Estoy deseando volver a jugar, al fin al cabo cuando te gusta el fútbol vuelves a recuperar la ilusión y estoy deseando regresar y hacerlo más fuerte".
Y nosotros esperamos que Iván vuelva más fuerte que nunca a los terrenos de juego.