El cerco al deporte ruso y bielorruso sigue 24 horas después de la aparición del Comité Olímpico Internacional (COI) y de las severas sanciones impuestas por la FIFA, la UEFA y la Euroliga que han tenido continuidad con diferentes federaciones internacionales que se han unido al boicot provocado por la invasión que sufre Ucrania.
Rusia se quedó fuera del Mundial de Catar 2022, sin su representante en la Liga Europa (Spartak Moscú) y sin sus equipos de baloncesto que participan en la Euroliga (CSKA Moscú, Zenit San Petersburgo y Unics Kazan). Todos fueron apartados de sus competiciones con carácter inmediato.
Antes, el COI lanzó un comunicado contundente que provocó la cascada de sanciones más llamativas. El organismo presidido por Thomas Bach recomendó no invitar a deportistas rusos y bielorrusos a las competiciones internacionales y su llamamiento hizo efecto en la FIFA, la UEFA y la Euroliga y en otras competiciones.
La Federación Internacional de Bádminton (BWF) se unió a la recomendación del COI, la FIA anunció una reunión para este martes, la Federación Internacional de Taekwondo (World Taekwondo) retiró a Vladimir Putin el cinturón negro honorífico de 9º dan y la Confederación Olímpica del Deporte Alemán (DOSB) pidió la expulsión de Rusia y Bielorrusia de todas las competiciones europeas.
Sólo fueron algunos ejemplos y era previsible que un día después, más federaciones se sumaran al boicot al deporte ruso y bielorruso con acciones contundentes o simbólicas. Por ejemplo, la de la Federación Internacional de Natación, que decidió retirar a Vladimir Putin la Orden que le entregó en 2014 y además aprobó que los nadadores de Rusia y Bielorrusia sólo podrán competir como neutrales, sin símbolos, bandera o himnos.
También actuó la Federación Internacional de Rugby (World Rugby), que acordó suspender "hasta nuevo aviso" a las selecciones y equipos de los dos países invasores. El organismo precisó que la decisión se adoptó "en línea con las recomendaciones del COI" y "teniendo en cuenta los intereses de los valores de solidaridad, integridad y respeto del rugby".
El remo tampoco se quedó atrás y la Federación Internacional (World Rowing) confirmó que no permitirá la participación de atletas rusos y bielorrusos en ninguna de sus competiciones "con efecto inmediato y hasta nuevo aviso".
Como la Federación Internacional de Voleibol (FIVB), que se unió a la catarata de sanciones y también apartó a los deportistas de ambos países "con efecto inmediato" y "hasta nuevo aviso". Además, informó de que todos los equipos nacionales, clubes, oficiales y atletas de voleibol playa y voleibol de nieve de Rusia y Bielorrusia, tampoco podrían disputar ninguna competición.
Tampoco faltó en la lista el tenis de mesa, que tomó la decisión de seguir las recomendaciones del COI e indicó que "hasta nuevo aviso" no se invitará ni se permitirá la presencia de jugadores rusos o bielorrusos en los eventos organizados por la Federación Internacional de Tenis de Mesa (ITTF).
Y, en otro tono más amable, el equipo paralímpico ucraniano, compuesto por veinte deportistas y nueve guías, anunció que participará en los Juegos de invierno de Pekín que se disputarán del 4 al 13 de marzo.
Competirán en dos deportes: biatlón y esquí de fondo. Seguro que intentarán dejar bien alto el pabellón de su país, necesitado de alegrías en medio del sufrimiento causado por Rusia tras invadir Ucrania.