Divertirse en el Maratón de Madrid. Ese era el objetivo de los 30.000 privilegiados, participantes en las tres distancias del maratón más esperado.
El protocolo anti covid-19 funcionó a la perfección. Una fiesta segura por las calles de Madrid y los mejores atletas disfrutaron de la fiesta. Los populares también.
El ganador de la prueba reina no hizo una buen marca, pero al final, todos contentos. Un impacto deportivo y también económico, de 40 millones de euros.
Volvió el deporte a las calles de Madrid. Por eso basta decir: Gracias.