De parón en parón. Así es la vida de Gareth Bale. Después de un mes sabático con el Real Madrid, de un mes entrenando en solitario y de un mes sin explicaciones, reapareció en un entrenamiento con la selección de Gales.
Saltó al césped de corto y con la sonrisa puesta. Eufórico y bromista. No se quiere perder las citas de su país para estar en la Eurocopa 2020.
Allí posa ante las cámaras, en Madrid huye del estadio Santiago Bernabéu antes del pitido final. En Gales atiende a sus fans, en el Bernabéu no.