El recuento de los votos que depositaron los electores españoles que residen en el extranjero que se comenzó a contabilizar este viernes puede ser decisivo en las mayorías necesarias para conformar el próximo Gobierno. Si por ejemplo el PP le arrebata el escaño a Junts en Girona, el PSOE necesitaría el 'sí' del partido de Carles Puigdemont para una hipotética investidura de Pedro Sánchez, ya que no le valdría solo con la abstención.
El gobierno de España estaría aún más, en manos de los independentistas. La negociación dependerá de dos fugados de la Justicia: Carles Puigdemont por parte de Junts y Marta Rovira, huída a Suiza, en nombre de ERC. Ella será uno de los miembros de su equipo negociador para la investidura junto a su secretaria general, Marta Rovira, el presidente de ERC en el Parlament, Josep Maria Jové, y el secretario general adjunto de Estrategia, Juli Fernàndez.
ERC prevé consultar a sus bases un eventual acuerdo para investir a Pedro Sánchez.
El expresidente de la Generalitat Artur Mas considera que el independentismo "tiene la sartén por el mango" para negociar una investidura con el candidato socialista y presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, y ha abogado por aprovechar la oportunidad.
Mas ha defendido fijar "una agenda común de negociación con Madrid" junto a los nacionalistas vascos y gallegos porque juntos conforman la fotografía real de la plurinacionalidad del Estado, en una entrevista en 'El Món' de este viernes recogida por Europa Press y ha advertido de que "la fuerza grande la tienes en el momento de la investidura", ya que, después, los partidos pierden buena parte de la misma, en sus palabras.
En ese sentido, el presidente del PP vasco, Carlos Iturgaiz advertía en que el PSOE y, especialmente Sánchez, quieren "volver a hacer un Frankenstein bis" y que en los próximos días "se va a ver" y, en concreto en Navarra, donde cree que "van a llegar a una alianza" entre el PSN y EH Bildu.
"Veremos lo que pactan, lo que estará encima de la mesa, y lo que no sabremos, como siempre, es lo que pactan por debajo de la mesa, que luego nos iremos enterando. Aquí el problema es que vamos a ver unos pactos ficticios encima de la mesa, con Puigdemont y con Otegi por parte de Pedro Sánchez y de su gobierno Frankenstein", ha añadido.