Culminado el proceso de negociaciones para sacar adelante los Presupuestos, la oposición sigue denunciando que las cesiones del Gobierno a los independentistas continúan.
Esquerra Republicana ha reconocido que su formación usó los presupuestos para lograr la derogación del delito de sedición y hoy sabemos que el PNV está negociando que no se aplique el nuevo impuesto a los ricos en el País Vasco. Unas decisiones que cuestionan la igualdad entre comunidades autónomas.
El PNV respaldó los Presupuestos Generales del Estado tras asegurarse la transferencia de los Ferrocarriles y sobre todo, mantener el cupo en las condiciones. Y ahora, los dos socios en el Gobierno vasco, PNV y Partido Socialista de Euskadi, negocian no aplicar el impuesto a las grandes fortunas en al País Vasco.
Según El Correo, el PNV apuesta por mantener el Impuesto de Patrimonio, porque cree que el de Grandes Fortunas va especialmente dirigido a las comunidades gobernadas por el PP en las que está total o parcialmente bonificado.
Y en vísperas de la Constitución, el socialista Emiliano García Page alerta contra desigualdades, tras una negociación presupuestaria que Esquerra se jactó de utilizar para la rebaja del delito de sedición.