El Instituto de Salud Carlos Tercero atribuye 1.834 muertes por calor extremo

  • Un estudio científico advierte que en España las muertes por calor extremo podrían llegar a 3.300

Tras superar la cuarta ola de calor todavía hay altas temperaturas en el sur y centro peninsular, mientras que en el norte se ha producido un desplome térmico.

El calor extremo es una de las causas de mortalidad en el periodo estival. Sin llegar a la mortalidad de 2022, el calor extremo este verano ha causado 1.800 defunciones, aunque algunas estimaciones duplican esta cifra.

El Instituto de Salud Carlos III cuantifica a través del Sistema de Monitorización de la Mortalidad Diaria (MoMo) en 95.904 defunciones desde el 1 de junio, de las cuales 1.834 son atribuidas a las altas temperaturas. Además, el máximo dato es del 12 de agosto con 79 fallecimientos.

26,9 grados

La aplicación Moralidad Atribuible en verano por Calor en España (MACE) se nutre de datos de fallecimientos obtenidos a través de MoMo y de las temperaturas promedio de España calculadas por Aemet.

Con estos datos, estima que en el periodo comprendido entre el 1 de junio y hasta el 22 de agosto se han producido 8.821 muertes por calor.

De estas, 3.034 han sido en días de calor extremo. Por meses, en agosto se han registrado 1.883 defunciones con 10 días de calor extremo y en junio 1.151 con 5 días de temperaturas excesivas.

“El calor en sí es un estrés para el cuerpo”

La curva de mortalidad se dispara en los 26,9 grados y la temperatura media del verano ha sido de 24,5 grados, aunque en agosto es de 26,2 grados.

Estrés térmico

El calor somete al cuerpo a un estrés térmico que se agrava de noche, por lo que el riesgo de mortalidad aumenta en la noche.

La temperatura óptima para conciliar el sueño de calidad está ente los 18 y los 21 grados, siendo imposible a partir de los 24 grados.

En esta cuarta ola de calor las mínimas sucesivas han rozado los 30 grados en varias zonas de España.