Las medidas de los gobiernos europeos para conseguir redudir los precios energéticos ya se han adoptado en algunos países. Descuentos directos en el precio de los carburantes,rebaja de impuestos o congelación de los precios, son algunas de las medidas que se están adoptando en la Unión Europea para hacer frente al aumento de los precios de carburantes y electricidad.
La imparable factura energética ahoga a muchos sectores.
Transportistas, pescadores, taxistas, agricultores y ganaderos y consumidores reclaman al Gobierno la adopción urgente de medidas para hacer frente a la escalada de costes.
En Europa algunos países ya han movido ficha.
En Francia a partir del 1 de abril, los conductores tendrán un descuento de 15 céntimos por litro de carburante. Una medida que costarán unos 2.000 millones de euros.
En Suecia, también optan por descuentos a la hora de repostar. Ayudas directas a los conductores con menos recursos y bonos para comprar coches eléctricos.
En Irlanda prefieren reducir el impuesto que grava los combustibles, que se traducirá en un ahorro de unos 12 euros por depósito.
Tambien en Bélgica que además reducirá el IVA del gas hasta el 6%.
En Polonia han recortado sustancialmente el IVA de los carburantes sin que Bruselas se haya opuesto.
En Rumanía han ido más allá congelando el precio de la luz y el gas durante 1 año a particulares y empresas.
En España aumenta la presión para adopten ya medidas similares, aunque el Gobierno lo fía a un consenso y no cntempla su puesta en marcha antes del 29 de marzo.
La decisión en los próximos días.