El rey Felipe VI elogió este martes “la estabilidad política y social” de Angola y tendió la mano a su presidente, João Lourenço, para que “España sea referencia en Europa” de la antigua colonia portuguesa desde el diálogo, la relación económica y la cooperación multilateral.
El monarca español hizo este ofrecimiento al comienzo de su visita de Estado a Angola junto a la reina Letizia, después de que Lourenço y la primera dama, Ana Afonso Dias, les dieran la bienvenida en el Palacio Presidencial en Luanda.
“Necesitamos socios con capacidad, credibilidad y voluntad con los que, partiendo de una confianza mutua, España pueda estar más presente en la región en beneficio de todos”, enfatizó Felipe VI en sus primeras palabras durante la visita, la primera a un país del África Subsahariana de su reinado.
Felipe VI reivindicó “la vocación africana” de España y el deseo de trenzar alianzas estratégicas con socios como la que fue colonia de Portugal hasta 1975 para así “abordar juntos los numerosos retos globales”.
“Es en este contexto donde Angola es para España un país prioritario por su estabilidad política y social; por sus recursos y buenas perspectivas económicas y por su activa diplomacia regional y multilateral. Pero además, y es lo más importante, por los sólidos lazos que ya nos vinculan”, incidió.
A la vista de los intereses compartidos, el rey abogó por que España “sea una referencia para Angola en Europa y de que Angola lo sea para España” en el África austral, ante el interés de otros países europeos, como Francia, de sacar partido de sus oportunidades de negocio.
“Disponemos de los mejores cimientos para ello (…) Tenemos un futuro prometedor”, dijo convencido don Felipe, el primer jefe de Estado que visita Luanda desde que Lourenço comenzó su segundo y último mandato en septiembre del pasado año, y quien recibirá al presidente francés, Emmanuel Macron, a principios de marzo.
Aprovechando la “excelente” relación bilateral, Felipe VI confió en que las empresas españolas puedan participar del plan emprendido por Lourenço desde su llegada al poder en 2017 para modernizar la economía angoleña, asentada en el petróleo, del que Angola es el segundo productor de África por detrás de Nigeria.Incrementar la presencia empresarial será el motivo del foro económico que se celebrará mañana, miércoles, en la segunda y última jornada de la visita oficial, que sucede a la que Lourenço hizo a Madrid en septiembre de 2021.
En su intervención tras la firma de tres acuerdos -industria, deporte y escuelas diplomáticas-, Felipe VI destacó de Angola su “admirable” proceso de reconciliación después de la guerra civil que sufrió desde 1975 hasta 2002, así como su aportación a la resolución de conflictos en África, lo que ha valido a su presidente ser reconocido con el título de “Campeón para la Paz” por parte de gobiernos vecinos, como recordó el rey.
Lourenço se felicitó del “ejemplar” estado de la relación y compartió el deseo de alcanzar “el nivel de excelencia”, en particular, en el plano empresarial.
El mandatario angoleño pidió a España que en su presidencia rotatoria de la Unión Europea (UE) en el segundo semestre de este año incluya entre sus prioridades recabar “apoyo y financiación” para poder impulsar la economía del país ante el impacto de la pandemia.
La antigua colonia portuguesa tiene a Rusia entre sus más cercanos aliados, si bien reiteró su deseo de “poner fin a la guerra y garantizar una paz definitiva”.
Tras los discursos y el intercambio de condecoraciones entre los dos jefes de Estado y sus esposas, los cuatro compartieron un almuerzo en el palacio que coronó los actos de bienvenida.
Previamente, el rey y Loruenço se reunieron para repasar el estado de la relación bilateral y, en paralelo, las primeras damas se vieron con mujeres angoleñas líderes de la sociedad civil para hablar de educación.
La agenda de hoy de la visita real va a proseguir esta tarde con la presentación de la Universidad Internacional de Cuanza, inaugurada en octubre de 2021 a iniciativa de la Fundación Universitaria Iberoamericana (Funiber), y el encuentro con la colonia española residente en Angola.
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En sus primeras palabras en Angola, Don Felipe ha expresado su "profundo pesar por la inmensa tragedia humana y material que están sufriendo los pueblos de Turquía y Siria como consecuencia de los terremotos".
En este sentido, ha recalcado que ambos países "saben que cuentan con toda la solidaridad y ayuda necesaria de las autoridades y del pueblo español para superar en lo posible las dramáticas consecuencias de este desastre".