Felipe VI ha presidido este viernes el acto de juramento o promesa de bandera de 29 nuevos soldados de la Guardia Real pertenecientes a la promoción del pasado año.
La ceremonia ha tenido lugar en el cuartel "El Rey", en el distrito madrileño de El Pardo, donde el monarca, con uniforme de capitán general del Ejército de Tierra y luciendo la boina azul de la Guardia Real, ha estado acompañado del jefe del Estado Mayor, teniente coronel Antonio Fernández.
Los 29 nuevos guardias reales (de los que dos son mujeres) provienen todos del Ejército del Aire y han formado parte de primer y segundo ciclo de formación de 2021.
La Guardia Real tiene como particularidad que integra a soldados de los tres Ejércitos y es la única unidad que no depende del Ministerio de Defensa, sino de la Casa del Rey, puesto que sus principales cometidos son dar escolta solemne al monarca y a la Familia Real, así como a los jefes de Estado extranjeros cuando visitan España, y rendir honores.
También interviene en tareas junto a otras unidades del Ejército, como fue el caso, a instancias de Felipe VI, de su participación en la operación Balmis que las Fuerzas Armadas desarrollaron durante la primera fase de la pandemia
Tras la jura, el coronel jefe de la Guardia Real, Juan Manuel Salom, ha agradecido al rey su presencia y, a los nuevos miembros de la Guardia Real, es ha recordado que con su juramento o promesa se han comprometido a una norma de conducta que exigirá “disciplina, voluntad de servicio, compañerismo, lealtad y abnegación”.
El acto, que también ha servido para la despedida oficial de 7 antiguos miembros de la Guardia Real, quienes han renovado su compromiso con la bandera y a quienes Salom ha agradecido su “ejemplo y entrega”.
Finalmente, la ceremonia ha concluido con el tradicional homenaje a los caídos y una parada militar en la que han participado todas las unidades que integran la Guardia Real.