La jueza del caso de Esther López, quien fue vista con vida por última vez la madrugada del pasado 13 de enero y fue hallada muerta el 5 de febrero en Traspinedo (Valladolid), ha levantado el secreto de sumario. Esto supone el cese de las escuchas telefónicas al móvil de Oscar, el principal sospechoso.
El último informe de la Guardia Civil concluye que los restos de pintura del pantalón de la joven no coinciden con los del paragolpes del vehículo del sospechoso. Tras comparar la pintura encontrada en la ropa de Esther con la de la parte delantera del vehículo del investigado, un Volkswagen T-Roc gris, el estudio explica que “la pintura no coincide ni en el color ni en la morfología”.
El Juzgado de Instrucción Número 5 de Valladolid ha ordenado el cese de la intervención del teléfono de Óscar ante la falta de resultados relevantes para la investigación después de tres meses desde que se intervino el teléfono, han informado hoy fuentes del TSJCyL.
"Ningún dato de interés se ha desvelado que pueda afectar a la presente investigación ya que el citado sospecha, y así lo manifiesta, que sus comunicaciones se encuentran intervenidas y por tanto solo habla de los problemas que le está acarreando la causa en el negocio de la inmobiliaria, de las noticias que salen en la prensa sobre las diligencias que se están practicando, manteniendo su inocencia, o de cualquier otra cuestión desvinculada de la causa", expone la jueza en el auto.
Subraya que los agentes de la Guardia Civil que han estado controlando llamadas y mensajes de esa línea telefónica concluyen que "el investigado no ha abordado los hechos, incluso ha dado instrucciones muy precisas a las personas de su entorno más cercano para que eviten hablar de ello y está haciendo uso de aplicaciones de mensajería que están fuera del alcance de la interceptación telefónica".