La mayoría de PSOE y Unidas Podemos en la Mesa del Congreso pone punto y final a la polémica por la votación de la reforma laboral. Pese a las protestas del PP que ha denunciado lo ocurrido en el Tribunal Constitucional, la Mesa decide que la votación es válida y que no se volverá a repetir. Esa es la decisión que ha llegado acompañada de una dura reprimenda de la presidenta a los populares.
La presidenta del Congreso, Mertixell Batet, ha dado por zanjada este martes la polémica por la votación de la reforma laboral, que salió adelante gracias al error de un diputado del PP, y ha defendido la independencia de los letrados de la Cámara, cuyo informe ha sido determinante para tumbar las quejas del Grupo Popular.
La Mesa del Congreso tumba las alegaciones del PP y concluye que "no hubo un error técnico", sino una equivocación del diputado del PP Alberto Casero. "Las decisiones adoptadas fueron correctas, el procedimiento de comprobación de voto fue el adecuado y, al no haber un error técnico, no había necesidad de reunir a la Mesa. Y, como saben, los errores en el voto no dan lugar a repetición o corrección alguna", ha dicho Batet.
La vicepresidenta segunda del Congreso de los Diputados, Ana Pastor, acusó este martes a la presidenta de la Cámara Baja, Meritxell Batet, de “parapetarse y esconderse” detrás de un informe de los letrados de la Cámara, que “no es vinculante”, sobre el voto erróneo del diputado del PP Alberto Casero durante la convalidación de la reforma laboral.
Así lo indicó Pastor en rueda de prensa en el Congreso junto al secretario cuarto de esta Cámara, Adolfo Suárez, después de que la Mesa del Congreso acordara que, analizadas las “quejas planteadas” por PP y Vox, las decisiones adoptadas durante la votación de la reforma laboral “fueron correctas, que el procedimiento de comprobación de voto fue el adecuado y que no hubo error técnico informático ninguno ni imposibilidad de votar”.
Según Pastor, con estas declaraciones la presidenta del Congreso pretende “hacer ver que quien critica su actuación está en contra de las instituciones”. “Esta es otra falacia que no vamos a permitir, por eso estamos aquí”, aclaró. A su juicio, Batet se “extralimitó al decidir ella “sin convocar la Mesa” que el problema que le planteó Casero antes de la votación “no lo iba a subsanar”.
Pastor criticó que al no convocar la Mesa se “privó” a este diputado de su “derecho a votar en el sentido en el que quería hacerlo”, y apuntó que la competencia para dejar al diputado votar de forma presencial y anular el voto telemático o de rechazarlo “era exclusiva de la Mesa” y Batet “se la apropió”.
“Faltó a la verdad”
Durante su intervención, Pastor también aseguró que Batet “faltó a la verdad públicamente” en el transcurso de la votación al asegurar, tras pedir la portavoz del PP en el Congreso, Cuca Gamarra, la palabra para denunciar esta situación, que, en palabras textuales de la presidenta: “la Mesa es conocedora y ha podido analizar lo que usted me va a plantear y es una cuestión técnica de la Mesa, de decisión de la Mesa y no de tratamiento del Pleno. No le doy la palabra”.
En este sentido, Pastor criticó que Batet dio por hecho que la Mesa se había reunido y que había analizado la situación, dos cosas que “no” ocurrieron. Por tanto, según su criterio, se “privó” a la Mesa “de su función y se faltó a la verdad en la sesión plenaria”.
Ante esta situación, Pastor denunció que hay miembros de la Mesa que están “absolutamente en contra” de privarle a un diputado del derecho “que le asiste conforme a la Constitución”. “Estos días hemos actuado en defensa del interés constitucional que tiene un diputado y que se ha conculcado un derecho fundamental de su señoría”, aclaró.