El PSOE ha rechazado este martes, con apoyo de PP, Vox y Ciudadanos, debatir en el Congreso la comisión de investigación pedida por su socio de Unidas Podemos y otros nueve partidos sobre el supuesto espionaje a independentistas catalanes. Sin embargo, no ha podido evitar que el presidente Pedro Sánchez comparezca ante el Pleno por este asunto.
La comisión de investigación, registrada tras publicarse en 'The New Yorker' el informe de 'Citizen Lab' sobre espionaje con el programa 'Pegasus', a políticos desvelado por 'The New Yorker', llevaba también la firma de ERC, Junts, PDeCAT, Bildu y la CUP, partidos directamente afectados, así como otros aliados parlamentarios del Ejecutivo de coalición, como el PNV, Más País-Equo y Compromís, y también el BNG.
En la Junta de Portavoces de este martes, los partidos proponentes intentaron que la comisión pudiera debatirse en el Pleno de la próxima semana, pero el PSOE se opuesto y se ha salido con la suya al sumar los votos del PP, de Vox y de Ciudadanos.
El portavoz socialista, Héctor Gómez, ha explicado en rueda de prensa que la intención del Gobierno es esperar primero a las explicaciones sobre este asunto que va a ofrecer el jueves la directora del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), Paz Esteban López, en la recién constituida comisión de Gastos Reservados.
Paz Esteban se enfrentará en esa comparecencia con cuatro diputados independentistas: Gabriel Rufián, por ERC; Miriam Nogueras, de Junts; Jon Iñarritu, de Bildu, y Albert Botran, de la CUP. Los tres últimos figuran precisamente en la lista de políticos espiados que ha publicado la revista The New Yorker.
Pero en la misma reunión se ha votado la petición de los partidos independentistas, junto con Más País y Compromís, para que el presidente del Gobierno compareciese en el Pleno del Congreso por el caso del espionaje, y aunque en este caso el PSOE y Unidas Podemos han votado juntos, no han podido evitar la citación de Sánchez, que sí ha sido apoyada por el PP, Vox y Ciudadanos. Queda pendiente de poner fecha, pero el PSOE insiste en que es mejor esperar a las explicaciones prometidas del CNI y de Defensa.
En todo caso, el presidente del Gobierno ya tiene pendiente otra comparecencia ante el Pleno del Congreso para hablar de las consecuencias de su apoyo al plan marroquí de autonomía para el Sáhara Occidental, que fue aprobada hace una semana en la Junta de Portavoces.
Gómez no ha desvelado si la intención de los socialistas es que Sánchez hable tanto de Marruecos como del espionaje en la misma comparecencia, siguiendo la práctica habitual de Moncloa, y tampoco ha dado pistas de la fecha de esa comparecencia incidiendo en que hay que compaginar la agenda parlamentaria con la del presidente.
Además, este miércoles está prevista la comparecencia en el Congreso de la ministra de Defensa, Margarita Robles, para informar sobre la aprobación de la Brújula Estratégica de la Unión Europea. En su día, el Gobierno ofreció que Robles diera cuenta de la polémica de las escuchas en esa sesión.
Gómez ha evitado polemizar con Unidas Podemos por exigir una comisión de investigación y se ha centrado en arremeter con el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, al que ha achacado un "inaceptable error garrafal" por asegurar que se trata de una "casualidad no menor" que el espionaje a Sánchez y Robles se conozca justo ahora que los socios del Gobierno le piden cuentas por el relativo a los independentistas.
Para el portavoz socialista, lo que debería hacer el líder de la oposición es "simplemente dar por buena la información que da el Gobierno" y no tacharle de "oportunista" cuestionando, a su juicio, los datos descubiertos por el Centro Criptológico Nacional tras analizar el pasado fin de semana los móviles de Sánchez y Robles.
En este contexto, Gómez ha reprochado a Feijóo que no se haya puesto "del lado de la democracia" y haya dejado claro que, como el PP de Pablo Casado, su única "prioridad" es "desgastar al Gobierno" y "poner en jaque" a las instituciones, en vez de apoyar al Ejecutivo ante una "situación tan grave". "Es irresponsable, demagogo, es un líder de la oposición que ni está ni se le espera", ha apostillado.
La secretaria general del PP, Cuca Gamarra, ha presumido este martes de su "responsabilidad", "lealtad" y "sentido de Estado" tras impedir con sus votos una comisión de investigación sobre el presunto espionaje, pese a las "descalificaciones" que el PSOE ha dirigido al líder del PP, Alberto Núñez Feijóo. A su entender, esa comisión solo persigue "debilitar al Estado y curiosamente viene de la mano de su socio de Gobierno, Podemos, y de los socios de investidura".
El portavoz adjunto de Ciudadanos en el Congreso de los Diputados, Edmundo Bal, puso este martes “en tela de juicio” que el Gobierno desconociera durante un año que los teléfonos del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y de la ministra de Defensa, Margarita Robles, estaban siendo espiados mediante el programa Pegasus.“No me cabe en la cabeza que los servicios españoles, durante un año, no hayan conocido que exista esta intrusión”, destacó en rueda de prensa en la Cámara Baja.
Vox reclamó aclarar si el espionaje con Pegasus del móvil del presidente, Pedro Sánchez, ha tenido relación con que el Gobierno cambiara la posición española sobre el Sahara de forma “tan abrupta”, ya que pasó abiertamente a apoyar la tesis de que la excolonia siga controlada por Marruecos. Así lo aseguró en rueda de prensa el portavoz de Vox en el Congreso, Iván Espinosa de los Monteros, quien dijo que la relación del espionaje a Sánchez con su cambio de postura sobre el Sahara es una “hipótesis más” que debe aclararse.
Por su parte, el portavoz de Unidas Podemos en el Congreso, Pablo Echenique, ha proclamado que es el momento de "asumir responsabilidades políticas de motu propio" por el "escándalo" de Pegasus, aunque por "responsabilidad" ha eludido "poner nombres propios" de aquellos que deben renunciar a sus cargos. Pero si ha deslizado que es "evidente" que un posible ámbito es el Centro Nacional de Inteligencia (CNI), dependiente del Ministerio de Defensa.
El portavoz de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián, ha subrayado este martes que el espionaje a políticos con el software Pegasus es "un escandalazo a nivel internacional" que "se puede cargar la legislatura y la democracia", por lo que ha instado al Gobierno a esclarecer el caso "con todos los mecanismos a su alcance".
"Quien crea que esto se va a tapar, que esto no les va a pasar por encima y que esto no se puede cargar la legislatura no está evaluando adecuadamente la magnitud de lo que tenemos enfrente", ha enfatizado Rufián.