Pedro Sánchez viaja este lunes a Davos para participar en el foro económico mundial que se celebra en la ciudad suiza.
Un encuentro al que, por su contenido económico, debería acudir también la vicepresidenta económica Nadia Calviño.
Pero la vicepresidenta primera se queda en España para presidir mañana martes el Consejo de Ministros, evitando así que presida la reunión Yolanda Díaz, a quien le correspondería hacerlo en ausencia de los dos primeros. Antes de viajar, Sánchez ha recibido en la Moncloa al presidente del Banco de desarrollo latinoamericano.
Proyectos económicos
El presidente del Gobierno expondrá en Davos los proyectos que está desarrollando su Ejecutivo para favorecer la economía española y que considera un acicate para la inversión en diversos sectores y, de forma especial, en el de los microchips.
En la confianza pretende insistir ahora, según fuentes gubernamentales, pese a que como en el resto de países, en España han hecho mella las consecuencias económicas y sociales de la covid-19 y las de la guerra en Ucrania.
La idea central de sus intervenciones públicas y reuniones con líderes empresariales y políticos durante sus tres días de presencia en Davos (del 23 al 25 de mayo) es que España ofrece un gran potencial para la inversión. Sánchez se volcará especialmente en hacer ver ese potencial en un ámbito como el de los microchips, ya que considera que España puede convertirse en un importante centro de diseño y fabricación de estos componentes.
Un asunto de especial relevancia debido al problema que se está viviendo por la escasez de semiconductores y que están afectando a diversos sectores industriales como el del automóvil.