Uno de los directivos de la consultora Neurona en México ha asegurado ante el juez que investiga el contrato que firmaron esa empresa y Podemos para las elecciones de 2019 que la mercantil no financió a ese partido ni le desvió fondos, y que se hicieron los trabajos acordados.
El titular del Juzgado de Instrucción número 42 de Madrid, que investiga el denominado caso Neurona, ha tomado declaración este lunes como testigo, por videoconferencia, a Germán Cobos Pío, representante legal de la matriz de Neurona en México -Neurona Consulting- y enlace con el administrador de Neurona en España, Elías Castejón.
El magistrado había citado también al miembro de Neurona Consulting Waldemar Aguado Butanda, responsable de la primera firma del contrato con Podemos, pero se ha aplazado porque no estaba disponible una documentación que había aportado Podemos, han detallado fuentes jurídicas.
La declaración se produce después de que la Audiencia de Madrid ordenase al juez interrogar a estos dos testigos al estimar el recurso presentado por el administrador de la filial española de la empresa Neurona imputado en la causa, Elías Castejón, al que se adhirió Podemos, y de Vox, acusación popular.
El juez investiga si pudo haber un delito electoral en la contratación por 363.000 euros de Neurona por parte de Podemos y, según indicó en uno de sus autos la Audiencia de Madrid, la comisión de dicho delito "también cabe cuando los fondos electorales son utilizados para el pago de un gasto electoral por un precio mayor a su coste real".
Germán Cobos, que fue la persona que se encargó de poner en marcha la filial española de Neurona, ha contestado este lunes a las preguntas de las partes sobre la realidad de los trabajos hechos por esa consultora para Podemos de cara a los comicios generales de 2019 y por la posibilidad de que se desviasen fondos a otras empresas, como Creative Advice Interactive, para financiar al propio Podemos o a otros partidos extranjeros.
En el sumario consta que Neurona efectuó abonos en fechas próximas a las elecciones de abril de 2019 a esa mercantil, con sede en Dallas, por 308.257 euros.
El responsable de Neurona ha negado que esta consultora financiara a Podemos ni que hubiese desvío de dinero hacia ese partido, y ha explicado que Neurona realizó facturas a otras empresas con las que mantenía una relación mercantil previamente, sin relación con Podemos, según la fuentes.
Ha sostenido que se prestaron los servicios de consultoría pactados con la formación morada, con desplazamiento de trabajadores de México a España.
No ha precisado en cambio qué trabajadores se encargaron de ese cometido electoral, según han destacado fuentes de las acusaciones.
Sí ha asumido que pudo ser un error propio la fecha que figuraba en el borrador de contrato entre Neurona y Podemos, que es semanas anterior a la constitución de la filial de Neurona en España.
Estas declaraciones son unas de las últimas diligencias que quedan pendientes en la causa, junto a un informe pericial, recientemente ampliado por la Audiencia Provincial de Madrid, sobre el coste y precio de los trabajos que realizó la consultora para el partido en la campaña de las generales de 2019.