Es la exposición inmersiva más grande que se ha hecho nunca sobre Van Gogh. Gracias a ella podremos en Madrid conocer más sobre la vida del inmortal genio holandés. Una experiencia de arte digital que se vive en 360 grados, permitiéndonos incluso caminar dentro de sus icónicas pinturas.
Empezamos entrando en el café de París. Aquí nos podemos sentar en una mesa junto a 'Los comedores de patatas' u ojear libros de la época.
En esta exposición está permitido tocarlo todo. Incluso los famosos girasoles, una réplica exacta en 3d que nos permite notar el grosor de las pinceladas.
Unas pinceladas que se pueden examinar incluso a microspocio. Y quien quiera demostrar sus dotes artísticas, puede atreverse con un juego de perspectiva o con el retrato.
La exposición recorre la vida de Van Gogh inspirándose en las cartas que escribía a su hermano. A través de una audioguía para no perder detalle, nos trasladaremos a Arlés para sentarnos en uno de los pajares que dibujó. E, incluso, meternos en una réplica de la que fue su habitación.También llegaremos al final de su vida. Para asomarnos a la ventana del sanatorio desde la que pintó la noche estrellada.
Una exposición para ver, oír y sentir en el espacio Ibercaja Delicias hasta el 9 de enero.