Desde este jueves el uso de mascarillas en exteriores, siempre que exista distancia de seguridad suficiente, ya no será obligatoria. Según cálculos de la OCU, el gasto en mascarillas en los presupuestos familiares ha sido el más alto de los relacionados con la pandemia y ha oscilado entre los 700 euros en el caso de las mascarillas higiénicas y los 1.515 euros en el caso de las FFP2.
Pero ojo, porque no nos desprenderemos de ellas completamente.
Seguirán siendo siempre obligatorias en interiores, en los medios de trasporte, incluso en los andenes o estaciones exteriores y en los eventos multitudinarios al aire libre en los que estemos de pie.
En el caso de estar sentados tendremos que llevarla si no puede mantenerse la distancia de seguridad.