Una multitud arropó esta tarde al papa Francisco en su recorrido en el papamóvil por las calles del centro de Lisboa hasta llegar al parque Eduardo VII, donde ha celebrado su primer encuentro con peregrinos en el marco de la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ).
En medio de un impresionante dispositivo de seguridad, el vehículo avanzó lentamente para cubrir los cinco kilómetros que separan la embajada vaticana del parque Eduardo VII, rebautizado como "Colina del Encuentro", donde se ha oficiado la ceremonia.
Decenas de miles de personas acompañaron su recorrido por las principales avenidas del centro de la ciudad.
Ya en el parque, donde desde hace horas aguardaban cientos de miles de personas, el papamóvil paró durante unos momentos para que Francisco pudiera saludar a los fieles.
Cerca de medio millón de personas, según los organizadores, asistían a este primer encuentro del Papa con los peregrinos.
"DEBEMOS ESTAR ATENTOS PARA NO DEJARNOS ENGAÑAR"
Durante esta jornada de bienvenida, el papa Francisco pidió a los jóvenes que no se dejen engañar por los "algoritmos" y "las ilusiones de lo virtual".
Francisco tomó la palabra para ahuyentar a los jóvenes de ese mundo virtual que "sabe quien eres, pero no te quiere".
"Cuántos lobos se esconden detrás de sonrisas de falsa bondad, diciendo que saben quién eres, pero que no te quieren" y te dejan solo cuando "ya no les interesas".
"Son las ilusiones de lo virtual y debemos estar atentos para no dejarnos engañar", dijo el Papa, que agregó: "Jesús no; Él confía en ti, para Él tú importas".
Francisco también les habló además de una Iglesia en la que "hay espacio para todos" y en "la Iglesia ninguno sobra, ninguno está demás" y les pidió que "cuando no haya este espacio, esforcémonos para que lo haya, también para el que se equivoca, para el que cae, para el que le cuesta".
El Papa, que habló en español para sentirse más cómodo e improvisar, animó a los jóvenes "a tener valor y seguir adelante" e instó a los chicos y chicas a repetir varias veces "Dios nos ama" antes de despedirse.
El Papa llegó a Lisboa el miércoles y clausurará la JMJ el domingo 6 con una misa multitudinaria.