El presidente del Gobierno Pedro Sánchez, a petición de sus socios, principalmente ERC, no ha ocultado su interés por lograr la llamada “armonización fiscal” entre regiones. Es decir, obligar a Madrid a subir impuestos.
La presidenta, Isabel Díaz Ayuso ya anunció que dará la batalla sin tregua contra cualquier injerencia fiscal en la Comunidad de Madrid, anunciando que Madrid se opondrá a cualquier subida de impuestos.
Desde Comunidades como la valenciana, gobernada por el socialista Ximo Puig, también se ha propuesto acabar con lo que denominan el dumping fiscal de Madrid: en otras palabras el descenso del tramo autonómico del IRPF, la bonificación del 100% del Impuesto de Patrimonio en Madrid y la bonificación casi total del de Sucesiones y Donaciones.