La Comunidad de Madrid ha invertido este año 3 millones y medio de euros para profesionales que sirven de apoyo en los centros especiales de empleo, que cuentan con un 70% de trabajadores con discapacidad. Su labor, dicen, es fundamental.
En algunas partes de la producción o si surge dudas este personal adicional aporta además tranquilidad a los trabajadores y consejo a la hora de corregir.
El mantenimiento de los puestos de trabajo, la labor social y también la oportunidad de que muchas personas puedan desarrollar una vida plena y autónoma.