España se sitúa como la primera potencia mundial víctima de ciberataques, al duplicar las cifras del año pasado. El objetivo de estos ciberdelitos es el robo de información personal, de datos bancarios e incluso la suplantación de identidad.
La técnica más usada por estos hackers es el phishing, un método que consiste en el envío de un correo electrónico, que simula ser una identidad legítima, con el cual el destinatario clickea y es redirigido a una página fantasma a través de la cual acceden a los datos personales.
Sin embargo, también existen otro tipo de métodos que pasan más desapercibidos y son muy comunes. El mayor en nuestro país, y al que hay mayor exposición, es la conexión a una red wifi pública, la cual vulnera la seguridad de nuestro teléfono móvil y, por tanto, se ponen en peligro nuestros datos personales almacenados en el mismo.
Ante esta situación, Silvia Martínez, analista de Ciberseguridad, recomienda “investigar sobre el uso que se da a los datos tanto de las WPN de pago como las WPN púbicas, ya que nunca sabemos qué tipo de conexiones están detrás de ellas”.