Los vecinos del Paseo de Extremadura han vuelto a cortar la A-5. Exigen soluciones a los problemas de movilidad y contaminación acústica que sufren desde hace décadas. Les han apoyado varios cargos públicos del PSOE y Más Madrid.
Tras la manifestación del 29 de enero, las asociaciones y los movimientos vecinales de Latina han organizado una nueva marcha desde el Centro Cultural El Greco hasta la plaza Juan Carlos Argüello 'Muelle'.
Las asociaciones vecinales de Latina temen que el alcalde, José Luis Martínez-Almeida, "finalice su mandato sin que el Ayuntamiento que dirige apruebe un plan concreto para resolver los problemas de contaminación atmosférica y acústica y de movilidad que desde hace décadas genera la autovía A-5 en su tramo del Paseo de Extremadura".
"A pesar de que durante la campaña electoral que le llevó hasta la Alcaldía el regidor prometió su soterramiento, en los últimos meses ha abandonado la iniciativa con la excusa del inicio de la Operación Campamento", han alertado.
Los colectivos promotores del acto lamentan que Almeida "haya declinado" reunirse con ellos y que la respuesta a su petición de encuentro para conocer los planes del Consistorio haya sido "una carta de la Secretaría del Area de Medio Ambiente y Movilidad en la que afirma que resulta razonable retrasar el soterramiento de la A-5 hasta que se lleve a cabo la Operación Campamento para facilitar la coordinación de las obras y evitar molestias innecesarias".
La coordinadora vecinal ha recordado que más de 130.000 vehículos usan la A-5 a diario en jornadas laborables. Se calcula que sus malos humos y ruidos afectan a más de 50.000 personas que residen en Lucero, Batán, Campamento, Aluche, Cuatro Vientos y Las Águilas.