La erupción del volcán en Cumbre Vieja ha alcanzado este domingo los tres meses de duración con los mismos signos de agotamiento de jornadas previas, por lo que se mantiene el plazo de diez días fijado por los científicos para darla por finalizada, de los que se han consumido cuatro.
En las últimas 24 horas no ha habido novedades, pues todos los observables directos en superficie y los datos obtenidos a través de la red de vigilancia siguen siendo bajos o nulos, aunque la portavoz del comité científico, Carmen López, ha insistido en la posibilidad de un repunte de la actividad eruptiva.
La emisión de gases es un día más "puntual y esporádica" y se concentra en los centros eruptivos y los jameos que se generan en la superficie de los tubos volcánicos.
Al respecto, Rubén Fernández, portavoz del comité de dirección del Plan de Emergencias Volcánicas de Canarias (Pevolca), ha insistido en la recomendación a vecinos de zonas desalojadas y a regantes que eviten acercarse a las zonas de coladas por las altas temperaturas y por la continua apertura de jameos.
De hecho, en algunas de esas aperturas de los tubos volcánicos se aprecian incandescencias ligadas a lava en proceso de enfriamiento, ha apuntado.
La señal del tremor sigue en la categoría de "ruido de fondo" y la sismicidad ha descendido a "niveles muy bajos" en todas las profundidades, aunque en este punto la portavoz del comité científico ha vuelto a advertir de la posible ocurrencia de terremotos sentidos por la población.
Las emisiones de dióxido de azufre en el penacho volcánico siguen en un rango bajo, entre 0,5 y 4,9 kilos por segundo, que es la nueva medida que utilizan los científicos a partir de ayer debido a "la debilidad e intermitencia" de aquel.
En cuanto a la calidad del aire, los niveles son buenos o razonablemente buenos en todas las estaciones de la isla, tanto por concentración de SO2 como de micropartículas, y no ha habido superaciones de valores límite horarios ni diarios.
Así y todo, la concentración de gases en la zona e exclusión ha impedido hoy el acceso por el sur de vecinos y regantes, tanto por tierra como por mar.
La predicción meteorológica apunta a la posibilidad de lluvias débiles en la segunda mitad del lunes y la llegada de un frente atlántico el martes que dejará precipitaciones localmente fuertes acompañadas de tormenta.
La cifra de personas albergadas en hoteles se mantiene invariable: 556, además de otras 43 dependientes que están alojados en centros sociosanitarios.
Los kilómetros de carreteras afectadas, de acuerdo con las estadísticas del sistema Copernicus, son 95,6, de los cuales 92,1 han sido arrasados