Los pequeños comercios buscan fórmulas para renovarse e intentar competir contra los grandes establecimientos y contra las compras online. En Madrid, cada vez son más las tiendas locales que se convierten en "puntos de recogida" para empresas de paquetería.
Colaboran en la recogida y envío de paquetes como forma de "atraer nueva clientela" y darse a conocer desde su tienda física. En el caso de Juan, propietario de una papelería de Boadilla del Monte, llevan casi cinco años haciendo recogida de paquetes: "Unos quince clientes vienen solamente a por sus paquetes", declara.
"Nos pagan algo simbólico, unos 15 o 25 céntimos por paquete, pero lo más interesante es que la gente que viene te conoce y compra", expresa Juan, "eso nos compensa esta labor".