Así lo reflejan los datos de dicho bono social de 250 euros para arrendar un inmueble del pasado año que tan solo llegó al 0,6% de los jóvenes que podrían ser beneficiarios que en total son unos 9 millones, según los registros del Consejo de la Juventud, por las imposibles condiciones para acceder a él que dejan a la mayoría fuera.
Y es que la ayuda está dirigida a jóvenes de entre 18 y 35 años, con unos ingresos brutos anuales en 12 pagas de 2.026 euros, como máximo. Además, el piso que se quiere alquilar no puede suponer una renta mensual de más de 600 euros, o 300 euros mensuales si se trata de una habitación, unos precios difíciles de encontrar en el mercado hoy en día.
En 120 Minutos hemos comprobado en un portal inmobiliario los pisos que se arrendan en Madrid por menos de 600 euros y tan solo hemos encontrado dos pequeños inmuebles de entre 20 y 30 metros cuadrados, en un bajo, sin ventilación y con la cama pegada al baño y a la zona de cocina.
Por lo que esta ayuda no parece calmar la tensión que está generando la situación de la vivienda estos días ya que, tras la manifestación del pasado fin de semana en Madrid reclamando soluciones al Gobierno, este mismo miércoles unos manifestantes han irrumpido en la firma de un protocolo de vivienda en el que participaban la ministra de Ciencia, Diana Morant Ripoll, y la ministra de Vivienda, Isabel Rodríguez, para reclamar soluciones a este problema que preocupa y mucho en España.