Las dudas de Madrid con Barajas y el control de turistas que pueden estar contagiados
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Sara Medialdea, de ABC, comenta en El Intercambiador el “milagro” del aeropuerto de Barajas, que lleva abierto 15 días y no se ha contabilizado ningún caso sospechoso de coronavirus.
“Desde la Comunidad están muy preocupados. A Sanidad de Madrid no se le ha comunicado ni un solo caso de personas con enfermedad o síntomas del COVID y el vicepresidente, Ignacio Aguado, asegura que eso no puede ser, que estadísticamente no es posible. Ven un problema porque si nadie les informa, no pueden hacer seguimientos y puede que Barajas se conviertan en un coladero. De hecho, Aguado recuerda que no hace mucho entró un vuelo desde Bolivia y luego sus ocupantes han ocasionado brotes en otras provincias. Debemos tener mucha precaución porque estamos dejando puertas abiertas para volver a meter el problema en casa”, cuenta Medialdea.
Pablo Rodero de 20 Minutos, apunta a que Madrid planea una tercera fase con limitaciones hasta agosto: “Así lo ha dejado caer Aguado aunque sin dar detalles. Una nueva normalidad más allá del 20 de julio, que tendrá que decidir el gobierno, mirando si se producen rebrotes significativos. Aun así, el vicepresidente dijo que la evolución de la pandemia en Madrid es satisfactoria”.
Medialdea se refiere a la nueva EvAU, donde se acaba lo de “soplar” al compañero porque es muy peculiar. “35.000 alumnos llamados a hacer los exámenes en cuatro días. Han tenido que enterarse a través de los institutos en qué lugar exacto tienen que hacerlos para evitar que den vueltas buscando. Tienen que llegar a una hora concreta y no mucho antes. No dejarán que se formen grupos ni antes del examen, ni después para comentar las preguntas. Tienen que llevar varias mascarillas, una por examen y que se lo lleven todo puesto, el agua, el material, porque no les van a dejar que compartan nada”.
Por último, Rodero comenta la apertura de las discotecas este viernes 3 de julio, sin baile y con un aforo del 40%. “Estarán todos sentados y en torno a mesas, charlando con mascarillas y otras cosas ajenas a la vida nocturna. Los empresarios de la noche aceptan que se va a poner el foco encima porque se mueven en escenario complicado. Calculan que el 30% de los locales, no podrán abrir sus puertas”.