Rafa Nadal se apuntó su cuarto Abierto de EEUU tras una dura batalla de cerca de cinco horas contra el ruso Daniil Medvedev, de 23 años, que en su sólido estreno en una final de Grand Slam se vio superado por la energía y consistencia del español, y cayó por 7-5, 6-3, 5-7, 4-6 y 6-4.
Nadal consigue así sumar otro título de Grand Slam a los 18 que ya ha acumulado y se aproxima peligrosamente al líder de los majors, Roger Federer, que acumula 20, mientras que se queda a sólo 640 puntos del número 1 de la ATP, Novak Djokovic.
Nadal niega cualquier "ambición desmedida"
Nadal dijo que la del US Open ha sido una "victoria especial", sobre todo por la dificultad que supuso, pero rechazó "cualquier ambición desmedida" y pensar en qué lugar está de la historia del tenis.
"La ambición es buena, pero la ambición desmedida es mala porque corres el peligro de no ver el mundo de forma positiva (...). Yo no puedo vivir así. Si no uno vive en un estado de tensión y presión todo el día que no lo deja ser feliz", se sinceró Nadal, quien dijo entender el debate de que haya tres tenistas -incluyó así a Novak Djokovic- que durante tanto tiempo dominen el circuito internacional.
Nadal afirmó que juega porque es "feliz" practicando tenis -"yo hago mi historia"- y admitió que "no puedo predecir el futuro" sobre cuánto tiempo puede durar su carrera, siempre pendiente de sus condiciones físicas a una edad, 33 años, en que es consciente que debe administrarse.