Un aficionado ubicado en uno de los fondos del Tottenham Hotspur Stadium propinó una patada al portero del Arsenal Aaron Ramsdale, al término del derbi londinense que concluyó con la victoria del conjunto de Mikel Arteta por 0-2.
El meta visitante, uno de los mejores del Arsenal, fue increpado por delantero brasileño Richarlison después de que el árbitro señalara el final del encuentro. El portero se dirigió detrás de su portería para recoger su botella y en ese momento, un joven espectador descendió de la grada y desde una de las vallas publicitarias propinó una patada a Ramsdale.
Los jugadores se agolparon en ese lugar. Los del Arsenal para proteger a su compañero y los del Tottenham para recriminar al meta su actitud mientras los miembros de seguridad del estadio separaban a los futbolistas y les alejaban del fondo. Mikel Arteta insistió en apartar a sus hombres de la situación y enfilar el túnel de vestuarios.