España es el tercer país europeo con más prevalencia de sobrepeso y el cuarto en obesidad infantil. Siendo éste un problema de salud pública de primer nivel, no disponemos de fármacos capaces de ayudar realmente en la disminución del peso corporal que reduzca la obesidad y al mismo tiempo ayude a prevenir las patologías asociadas a la misma: cáncer, enfermedades cardiovasculares, reumatológicas o metabólicas como la diabetes.
Como señala en Fórmula Salud la catedrática y directora del Máster en Nutrición Personalizada e Intervención Nutricional de la facultad de Farmacia de la universidad CEU San Pablo, Elena Alonso Aperte, “se ha fracasado en la posibilidad de disponer de fármacos eficaces para perder peso y los que más recientemente se han revelado eficaces, están indicados para tratar la diabetes tipo 2 que, como efecto secundario, permite una notable pérdida de peso. Por esto mismo hay un problema de desabastecimiento de estos medicamentos perjudicando a los pacientes diabéticos”.