Carmen Fernández es una sevillana asentada en Madrid desde hace más de 15 años. De profesión esteticista, atiende a domicilio a un público muy exigente.
El coche es imprescindible en su día a día, en él transporta una camilla portátil y un maletín con sus productos de belleza que la acompañan allá donde vaya.
En su itinerario por la ciudad, conoceremos a varios de sus exclusivos clientes que nos harán participes de algún que otro secreto.
Pero lo más importante que nos ha enseñado Carmen es la pieza clave en un tratamiento de belleza, la esteticista que se encarga de asesorar, escoger y aplicar los mejores productos a sus clientes.
Un elemento imprescindible a tener en cuenta cuando se escoge un centro para realizarse cualquier tratamiento de belleza, ya que está en manos de esta profesional el resultado final y, para eso, tiene que conocer muy bien tanto las necesidades del cliente como sus productos.