Joan Manuel Serrat cumple ochenta años. Con más de quince millones de discos vendidos a sus espaldas, el cantante catalán suma una nueva década en un año lleno de reconocimientos.
Nacido en el seno de una familia obrera, el joven Joan Manuel Serrat se inicia en el mundo de la música en el año 1965.
Aquel joven acabaría convirtiéndose en un referente indiscutible de la música española que ha elevado la música de autor a otros niveles.
Poesía y melodía se dan la mano en las composiciones de este artista para formar una sinfonía capaz de conquistar los corazones de varias generaciones.
Hace ya un año que ofreció el último concierto de su carrera en su ciudad natal, aunque el artista seguirá componiendo y cantando. "Yo he dejado de subirme a un escenario, no he dejado de vivir", afirma.
Serrat afirma que todavía tiene fuerza para muchas cosas y su agenda rebosa de actividad.
Solo este mes de diciembre ha recibido la Medalla de Honor de la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE) en Madrid, el Guardó d'Honor del sindicato UGT-PV en Valencia y ha rendido homenaje a su mánager 'Berry.
Desde que en diciembre de 2022 se despidiera de los escenarios con un emotivo concierto en Barcelona, su ciudad natal, su presencia se ha multiplicado en otras palestras, como la Universidad de Barcelona, que le ha investido doctor honoris causa, o el Colegio de Arquitectos de Barcelona, donde ha recibido el Premio Nacional de Cultura de la Generalitat.
Pero no sólo los premios le han tenido ocupado, también ha dado charlas en Harvard, ha mantenido su estrecha relación con la ONG Open Arms y ha hecho algunas apariciones en conciertos de amigos, como el del cantautor catalán Joan Isaac.
"Vivo más ajetreado que nunca -reconoce Serrat-, que espera "que esto afloje un poco, porque vivo más acelerado que en mi época de giras".
Pero por el momento no parece que esta actividad frene, porque en enero tiene previsto recoger el Premio Convivencia Ciudad Autónoma de Ceuta y participar en el concierto de Javier Ruibal en Inverfest.
El cantautor se ha reafirmado muchas veces durante este último año en su decisión de abandonar los escenarios como lo ha hecho, "con salud y sin ninguna razón acuciante para hacerlo".
Serrat es consciente de que la edad obliga a poner límites y habla de la vejez como de una etapa difícil. "No me gusta mucho el camino para donde voy -reconoce el cantautor-, pero como sé que no lo puedo cambiar, corre y saca de ello todo lo bueno que puedas".