El ministro de Agricultura y Alimentación, Luis Planas, dejaba claro este jueves que cualquier decisión con "significado político" sobre la cadena alimentaria y los precios tiene que pasar "siempre" por el ministro del ramo y por el Consejo de Ministros y ha advertido: "No tengo previsto llevar a cabo ninguna medida para intervenir una cadena que funciona de forma adecuada".
"La posición del Gobierno es la posición del ministro que les habla", ha dicho a los medios Planas en una visita a los regadíos de Monegros II, en la provincia de Huesca.
De este modo se ha pronunciado preguntado, en rueda de presa, por los movimientos de la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, para fijar un tope en el precio de algunos alimentos y por la reunión que esta y el ministro de Consumo, Alberto Garzón, han mantenido este jueves con directivos de Carrefour en esta línea.
El ministro ha insistido en estas declaraciones a los medios en que él es el competente en alimentación y que su intención, lejos de limitar los precios de algunos alimentos, es "preservar" la cadena alimentaria y que los ciudadanos tengan alimentos "al precio más asequible".
La cadena alimentaria funciona a su juicio de forma "adecuada, moderna y eficiente". Y por eso no hay "ninguna necesidad" de intervenirla.
"El bolsillo de los ciudadanos atañe a todo el Gobierno y todo el Gobierno debería dar soluciones", respondía este viernes desde Bilbao la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, en alusión a su iniciativa de topar los precios de los alimentos básicos.
La ministra, de visita en Bilbao para protagonizar un nuevo "acto de escucha" de Sumar, ha defendido que la iniciativa es posible, "tan posible que una gran multinacional ya se ha sumado", ha indicado, en alusión a Carrefour. A su juicio, adhesiones como esta evidencian que "lo que hacemos es acertado".
El ministro de Consumo, Alberto Garzón, ha afirmado este viernes que cuando se habla del bolsillo de las familias españolas "es competencia de todo el Gobierno", precisando que si se trata de decisiones de consumo "es competencia también del Ministerio de Consumo", sostenía desde Málaga.
Por su parte, el presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo ha dicho que estas discrepancias parecen una broma y ha alertado de que "estas contradicciones permanentes entre el presidente y sus vicepresidentas, entre las vicepresidentes y los ministros, son ya una señal de deterioro muy profundo que está sufriendo el Gobierno de España en este momento".
"El sainete está muy bien para celebrar fiestas pero cuando se habla de alimentos no se le puede tomar el pelo a los ciudadanos desde el Gobierno", y ha pedido respeto a la ciudadanía que tiene dificultades para llegar a fin de mes y llenar la cesta de la compra.