Pepe Álvarez confía en que Junts apoye reducir la jornada tras reunirse con Puigdemont en Waterloo
- Alvarez: Sería "bueno" que tanto el Gobierno como Junts fueran conscientes de que hay que "cumplir acuerdos y hacer interpretaciones flexibles" de los acuerdos porque es un elemento "para poder continuar la legislatura con buen pie"
El líder de UGT ha viajado a Waterloo (Bélgica) para buscar el apoyo del fugado Carles Puigdemont. Hacía 9 años que Pepe Alvarez no se veía cara a cara con el expresidente de la Generalitat de Catalunya. Tras la reunián ha dicho que queda mucho trabajo que hacer poro ver posible que los de Junts apoyen al reducción de la jornada laboral que los sindicatos negociación con el Gobierno.
"Una reunión para nosotros positiva, una reunión que nos abre puertas para continuar este proceso de diálogo con el presidente de Junts, con el presidente Puigdemont", dijo Pepe Álvarez en declaraciones a la prensa en Bruselas.
"A nosotros nos gustaría que, por lo que hace referencia a la reducción del tiempo de trabajo, a pasar de las 40 horas a las 37, pudiéramos tener ya una reunión con más datos que nos permitieran que la posición de Junts pudiera ir en la dirección, por ejemplo, que tiene el Partido Nacionalista Vasco", en el sentido de "ir a un proceso de negociación que nos permitiera poder hacerlo con un cierto consenso", añadió.
La reunión, que tuvo lugar en la llamada 'Casa de la República' en Waterloo, a unos 30 kilómetros de Bruselas, duró una hora y media y fue el primer encuentro entre Álvarez y Puigdemont en nueve años, precisó el líder de UGT.
Álvarez indicó que estos contactos con Junts deberían permitir "que se aprueben acuerdos, normas, y si no los aprueban, que puedan ser portadores de esas propuestas del sindicato".
Sobre la jornada laboral, añadió que en la reunión le presentó a Puigdemont el último estudio sobre cómo afecta la reducción del tiempo de trabajo en Cataluña.
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Y dijo que expresamente le pidieron que si las negociaciones desde la "perspectiva política" permiten que haya ese "proceso de colaboración" puedan tener "ya una reunión con más datos" que les podrían permitir "que la posición de Junts pudiera ir en la dirección, por ejemplo, que tiene el Partido Nacionalista Vasco, que no es negar la revolución del tiempo de trabajo, sino, en todo caso, ir a un proceso de negociación" que permitiera "poder hacerlo con un cierto consenso.
Álvarez aseguró que tiene la impresión de que Puigdemont no tenía la misma posición antes de entrar que de salir de la reunión de hoy y confió en que esa actitud "vaya a más".
En ese sentido, dijo que cree que "vamos a poder continuar una línea de trabajo" con el grupo parlamentario y la propia dirección de Junts "que nos permita el poder avanzar".
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Además de por las citadas razones económicas, Álvarez reflexionó que su reunión con Puigdemont suscitó "máximo nivel de interés" por el estado de las negociaciones del Gobierno con Junts, en las que reiteró que UGT no forma parte. "No hemos preguntado a nadie para venir, no traemos ninguna agenda que no sea la propia del sindicato, entre otras cosas, porque nadie nos lo ha pedido", subrayó.
Pese a todo, el líder de UGT reconoció que había hablado con el expresidente catalán de la moción de confianza que Junts planteó la semana pasada al Gobierno de Pedro Sánchez. "Creo que hay una cuestión que tienen que acabar de cerrar el actual Gobierno de España con Junts, que es el cumplimiento de los acuerdos a los que llegaron para la investidura", opinó Álvarez.
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Sería "bueno" que tanto el Gobierno como Junts fueran conscientes de que hay que "cumplir acuerdos y hacer interpretaciones flexibles" de los acuerdos porque es un elemento "para poder continuar la legislatura con buen pie, aprobando leyes y reformas", dijo.
Y a partir de ahí, señaló, "parece que se van a abrir, si es que hay acuerdo en relación con esa materia, perspectivas de negociación del resto de cuestiones que puedan permitir continuar la legislatura".
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No obstante, Álvarez recalcó que su conversación sobre ese asunto con Puigdemont no había ido "más allá" de comentar la situación y "conocer directamente su opinión".
Y reiteró que su valoración de que es igualmente "anómalo" que se tenga que reunir con el líder de Junts en Bélgica como que "no se haya puesto en marcha la ley se amnistía", lo que habría permitido, dijo, que el encuentro se hubiese producido en Madrid.
