La Policía Municipal de Madrid ha intervenido durante la noche del viernes y del sábado en un total de 246 fiestas ilegales celebradas en domicilios y locales de ocio por incumplimientos de la normativa por el coronavirus.
80 de ellas se produjeron en la noche del viernes y 166 la del sábado, en algunas de las cuales había un número de personas superior al permitido y no se usaba mascarillas ni otras medidas de seguridad.
Entre las actuaciones, en el distrito de Chamberí se intervino en un local clandestino donde se celebraba una fiesta con 50 personas, que fueron denunciadas por incumplir las medidas sanitarias.
También en un bar de Villa de Vallecas se denunció a 41 personas por incumplir las medidas sanitarias, se levantó un acta por incumplir la ley de espectáculos y se detuvo al encargado por posible delito contra la salud pública y desobediencia.
Hasta cinco horas han empleado los agentes en identificar a las 75 personas que se concentraban en Chamberí. Otras 37 celebraban en un piso de alquiler turístico de Gran vía una fiesta en la que se incumplía además del toque de queda y las restricciones de movilidad, la distancia de seguridad y el uso de mascarilla.
Unas prácticas, las de las fiestas ilegales, que cada vez más se profesionalizan con aplicaciones móviles por toda la capital. Hasta 20 euros llegan a pagar por entrar en estas fiestas donde la consumición se vende a 10 euros por copa.