Cómo funciona Madrid: Metropolitano
- Cuando se organiza un evento deportivo en el Estadio Cívitas Metropolitano hay mucho más de lo que no se ve
- En ¿Cómo Funciona Madrid? Nos introducimos en el rojiblanco corazón de este estadio para explicar su funcionamiento
Cuando la pelota empieza a rodar en el terreno de juego diferentes profesionales trabajan para que el partido sea todo un espectáculo. Desde las luces, la música, el césped, hasta el más mínimo detalle en la colocación de las botas de los jugadores.
El equipo técnico, directiva, jugadores, camareros, personal de limpieza, y una larga lista de profesionales trabajan para un deporte que generó en España en la temporada 2021/2022 un total de 18.350 millones de euros, lo que supone el 1,44% del PIB español.
En España el fútbol es el deporte más seguido por ello, los estadios han de ser amplios. En concreto, el Metropolitano dispone de 11.000 metros cuadrados para albergar todo tipo de eventos, así como palcos para 500 personas, un auditorio para actos tales como ruedas de prensa o para aquellas empresas que quieran hacer uso de este, según nos explica el presidente del Atlético de Madrid, Enrique Cerezo.
Seguridad dentro y fuera del campo
Frente a eventos multitudinarios como es un partido de fútbol la seguridad se gestiona tanto desde el interior del propio estadio como desde fuera.
En la ‘Sala Simeone’ el personal de seguridad se reúne antes de cada evento para organizarse, al igual que lo hace la Policía Nacional desde el distrito de Moratalaz.
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Los agentes se dirigen a la armería donde disponen de todo el material como fusiles o escopetas.
Además, la comunicación es uno de los aspectos principales en esta coordinación por lo que emplean sistemas de comunicación entre todas las unidades que formarán parte de este dispositivo.
Césped de última tecnología
En un estadio de futbol el cuidado del terreno de juego es fundamental, ya que en función de cómo este se encuentre influirá en el partido. El Metropolitano dispone de diferentes elementos de control y cuidado como es la temperatura, a través de sistemas de calefacción similares al suelo radiante. Así se aseguran su correcto crecimiento y cuidado.
En cuanto a su composición según explica Manuel Cifuentes, Director de infraestructuras, operaciones y servicios generales, es hibrido ya que contiene un 3% de plástico.
Aforo
Los asistentes contemplan el partido desde la grada. Como curiosidad, el Vicente Calderón fue el primer estadio en España con butacas. Ahora, el Metropolitano dispone de un aforo para 70.460 asistentes, unos 6.020 son VIP.
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El Metropolitano también cuenta con un área exclusiva, un círculo que rodea el campo con los palcos más lujosos. Asimismo, asistentes a estos disponen de un servicio especial, con un camarero por palco.
Los colchoneros más pequeños
Nuestro presentador, Juan Ramón Lucas, descubre uno de los rincones más especiales del estadio. Se trata de la sala donde los niños y niñas que acompañaran a los jugadores en su salida por el túnel, esperan hasta la llegada de este momento.
Estos pequeños tienen edades comprendidas entre 5 y 9 años debido a la altura. Aquí se les tranquiliza y anima antes de conocer a los jugadores con quienes intercambian algunas palabras.
Otra de las labores más importantes en el desarrollo del partido es recoger los balones que salen fuera de las líneas del terreno. Los recogepelotas tienen prohibido hablar con los jugadores y la obligación de dar los balones de manera indiferente a un equipo u a otro. Además, se encuentran repartidos por todo el campo.
Leyenda del Atletico de Madrid
Jorge Resurrección, conocido como ‘Koke’ es el jugador que más partidos ha disputado con la camiseta rojiblanca.
Cuando corean su nombre o la afición les anima segura que esto les ‘da fuerzas para luchar y seguir remando’.
"Me siento un privilegiado"
Primera pareja de socios
Terminamos este capítulo con la historia de Alicia y Manuel, una relación que comenzó cuando el equipo se trasladó del Calderón al Metropolitano.
Manuel fue diagnosticado de párkinson, lo que no fue una fácil noticia para él. En ese momento sólo buscaba rodearse de personas que le aportaran. Por eso, se fijó en la sonrisa de Alicia.
Se veían cuando el Atleti jugaba en el Calderón, ya que se sentaban con dos asientos de separación. Manuel no sabía cómo se llamaba, ni si quiera habían intercambiado más palabras que ‘Hola’ y ‘Adiós’. Pero un día, Manuel escuchó como una amiga la llamaba ‘Ali’.
Tras muchos años de socio del Atlético, Manuel acudió a las oficinas del Metropolitano y, mintiendo, aseguro haberse encontrado un objeto de Alicia y que quería devolvérselo. Desde las oficinas llamaron a Alicia quien permitió que le dieran su número de teléfono.
