Sandro Rosell señala directamente a Joan Laporta. Acusa a su predecesor de haber continuado con los pagos a José María Enriquez Negreira en su primer mandato.
"No es muy coherente que el FC Barcelona se presente como entidad perjudicada cuando el propio presidente actual lideró durante dos mandatos anteriores la junta del club, habiendo retribuido durante los mismos dichos informes arbitrales por lo que ahora pretende personarse como perjudicado", señala Rosell.
Sin embargo, a ojos de la Fiscalía, lo que ocurriera en la primera etapa de Laporta, ya ha prescritoPor otra parte, el CSD no pudo personarse como acusación particular.
El juez considera que no tiene las competencias en los delitos por los que se investiga al Barcelona: corrupción privada en el deporte, administración desleal, y falsedad en el documento mercantil.
A través de un escrito, la Abogacía del Estado ha contraatacado: "Es el organismo estatal encargado de velar por la limpieza en las competiciones deportivas españolas. Existen indicios de que el FC Barcelona haya estado efectuando pagos a José María Enríquez Negreira para que éste realizase actuaciones tendentes a favorecer al Barcelona. Se estaría viendo afectado y conculcado el bien jurídico del juego limpio en el deporte español".
Por lo que piden que se estime el recurso de apelación.