¿Sabías que el queso de cabra tiene menos calorías y menos grasas que el queso de vaca? Además de tener calcio y proteínas, es mucho más fácil de digerir por el estómago. Nuestra compañera Sofía Irazusta se ha puesto las botas y se ha ido a Colmenar Viejo a aprender los secretos del pastoreo.
Nos acompaña Rafael, ganadero de la zona, que nos cuenta que comenzó con cabras del Guadarrama, pero que ahora tiene cabras murciano-granadinas. “En España, generalmente, se tiene esta cabra en explotaciones intensivas cerradas y nosotros somos de los pocos que las pastoreamos en el campo y que somos ecológicos”.
¿Qué significa exactamente que sea ecológico? “Para que un producto sea ecológico y que la ganadería se considere ecológica tienes que cumplir una reglamentación europea que lo regula todo: desde el nacimiento hasta que los quesos y yogures están en el supermercado”, explica Rafael. Sin olvidarnos de otros factores de importancia como la alimentación o la estancia con las madres.
Gracias al pastoreo, las cabras pueden aprovechar los recursos de la zona, además de ser ellas las que eligen qué es lo que quieren comer.
Al pastorear libres por el campo, las cabras se alimentan de bellotas, tomillo, jara y otros productos naturales que encuentran, lo que “le da una peculiaridad a la leche que no tiene las de las granjas intensivas, donde los animales no salen y solo comen lo que les dan”.