Teresa vino a vivir a la calle Argumosa hace 19 años. Estos días ha recibido un burofax en el que le informar de que tiene que abandonar su casa de alquiler antes del 1 de junio.
El inmueble en el que vive Teresa fue vendido a una empresa tras el fallecimiento del propietario y los vecinos temen que ahora pretenden construir pisos turísticos.
Teresa nos cuenta que hace un par de meses vino a hablar con los inquilinos un representante de la empresa propietaria ofreciéndoles 2.000 euros a cambio de que abandonaran los pisos al mes siguiente.
El edificio consta de 33 viviendas de las que ya han sido desalojados algunos residentes. Otros, han intentado negociar un nuevo alquiler con el nuevo propietario pero aseguran que sin éxito.
