El palentino ha reabierto hoy sus puertas y hemos sido los únicos que lo hemos podido ver por dentro. A este bar de toda la vida le han dado un toque de modernidad pero han mantenido fotos y recuerdos de antaño. Su dueña, Loli, ha vuelto a llorar de emoción.
Cerró sus puertas hace un año por el fallecimiento de uno de sus propietarios. Pretende mantener la misma esencia de siempre, por lo que han reformado el establecimiento conservando sus elementos anteriores, así como su nombre y casi calcada tipografía.
Se mantendrán los sabores originales
El sandwich mixto y el pepito de ternera eran los grandes clásicos de la carta del Palentino. Los nuevos dueños los mantienen pero sabrán igual.