La colada de lava sigue con su efecto destructor en la isla de La Palma. Este miércoles se han vuelto a ordenar nuevas evacuaciones, que afectan a 300 vecinos y ya son 7.000 las personas desalojadas.
Desde la pasada medianoche, se han registrado un total de 60 terremotos, uno de ellos de 4,5 grados, en Villa de Mazo, el de mayor magnitud desde que comenzó la erupción del volcán. Unos sismos que, junto a las altas emisiones de azufre, hacen pensar que el final de la erupción no está cerca.
La erupción sigue provocando nuevas evacuaciones en la zona de los Llanos y en Tazacorte. La lengua que discurre por el noroeste ha perdido potencia, sin embargo la que discurre más al sur acumula ahora el máximo de energía y avanza con rapidez
La lava lleva arrasadas unas 90 hectáreas de plataneras en el Valle de Ariadne y cada vez hay más edificaciones afectadas.
De momento, la calidad del aire es buena pero preocupa la cantidad de ceniza, hay toneladas, acumuladas en calles y viviendas, casas sepultadas por los sedimentos lávicos con los que hay que tener especial cuidado ya que pueden provocar derrumbes de estructuras. Su retirada llevará meses.
Desde Involcan estiman que desde que comenzó la erupción se han acumulado entre 8 y 9 millones de metros cúbicos de tefra (depósito de piroclastos).