Argentina se asoma al precipicio de la mano del presidente Mauricio Macri. Cae el peso, cae la Bolsa, la prima de riesgo se dispara y los tipos de interés han subido un 70%. El país no olvida la pesadilla de un 'corralito'.
Ni yendo puerta por puerta a explicar sus medidas consigue Mauricio Macri frenar su caída en las encuestas.
Se recrudece la crisis económica en el país y ninguna de sus medidas ha conseguido frenarla. "Hizo promesas y no cumplió ninguna". "Cada vez hay más gente en la calle, cada vez hay menos laburo". "La economía no está bien y no se manejó bien", aseguran en la calle.
La inflación se ha disparado un 55% en el último año, lo que ha provocado una fuerte depreciación del peso en los últimos días y que los argentinos vuelvan a refugiarse en el dólar. "Es la inversión más rudimentaria que tiene el ciudadano común para poder salvaguardar su poder adquisitivo del dinero", asegura Marcelo Trovato, analista financiero.
Una situación que resucita los fantasmas de 2001, cuando Fernando de la Rúa decretó un 'corralito' que duró un año. Para los mercados, sólo hay otro país en Sudamérica con más riesgo donde invertir: Venezuela.
El Gobierno, sin embargo, acusa a la oposición. "La incertidumbre que tienen los mercados acerca de cuáles son las propuestas de la oposición, las nuestras son muy claras", sostiene el ministro de Economía, Nicolás Dutovne.
Hay dudas también sobre las elecciones presidenciales de octubre. No está claro que Macri se presente a la reelección con su credibilidad por los suelos.
Tampoco se sabe quién será su rival. La expresidenta, Cristina Fernández guarda silencio pero no deja de subir en los sondeos.
Macri pidió al FMI más de 56.000 millones de dólares el año pasado y el regreso de Fernández a la Casa Rosada podría suponer la suspensión del pago de la deuda.
El propio presidente de Argentina, Mauricio Macri, dijo este jueves que el aumento en la prima de riesgo y la caída del peso se debe a que los mercados financieros dudan del país por una posible vuelta del peronismo en los comicios de octubre, pero remarcó que una "mayoría de argentinos" no quiere volver atrás.