El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha comprometido ayudas para reparar los daños sufridos por la avenida extraordinaria del Ebro, que ha afectado a decenas de municipios y miles de hectáreas de cultivo de Aragón, Navarra, La Rioja y Cataluña.
La crecida continúa y su cresta atravesó en la tarde de este martes la ciudad de Zaragoza.
Con un caudal de 2.200 metros cúbicos por segundo y una altura de 5,70 metros a su paso por el centro de la capital aragonesa, por debajo de los caudales máximos de la riada de 2015, y aguas abajo la tendencia es ascendente.
El Ebro ha anegado aguas arriba de Zaragoza decenas de miles de hectáreas.
Cientos de personas de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, de la Unidad Militar de Emergencias, de la Cruz Roja, de la Confederación Hidrográfica del Ebro o de Protección Civil, llevan días trabajando sin descanso para evitar consecuencias aún mayores.
Una riada que preocupa también a la Casa Real, puesto que el rey Felipe VI ha telefoneado esta mañana al presidente de Aragón, Javier Lambán, para interesarse por la crecida del Ebro y transmitirle su solidaridad con los afectados por las inundaciones.
El presidente del Gobierno ha visitado hoy Pradilla de Ebro (Zaragoza), Buñuel (Navarra) y Alfaro (La Rioja), donde ha compartido la preocupación de los alcaldes de la ribera de las tres comunidades, a los que ha prometido, en una declaración pública en la localidad zaragozana, poner en marcha "todos los resortes del Estado" para paliar los daños a los afectados por esta crecida.
De hecho, ha recordado que este viernes el Consejo de Ministros aprobará la declaración de zona catastrófica para las áreas más afectadas de las tres comunidades para tratar en lo materialmente posible que los afectados recuperen su día a día cuanto antes.
LA CRECIDA LLEGA A ZARAGOZA
La punta de riada pasa esta tarde por Zaragoza, de momento con un caudal por debajo de los 2.400 metros cúbicos que se preveían inicialmente y de los 2.448 alcanzados en la avenida extraordinaria de 2015, aunque el alcalde, Jorge Azcón, ha advertido de que esta punta puede tardar en pasar hasta 36 horas.
Se han inundado amplias zonas cercanas a la ribera, como el recinto de la Expo, se ha evacuado a algunas personas de urbanizaciones de casas unifamiliares cercanas al cauce y se han balizado las zonas de peligro.
Sin embargo, desde el Ayuntamiento de Zaragoza aseguran que la situación está ahora mismo controlada y sin afecciones importantes.
Durante la visita de Sánchez, Javier Lambán ha destacado la coordinación "perfecta" frente a la "descoordinación y dejadez" en la gestión de 2015 (cuando gobernaba el PP), así como la "previsión inversora" del Gobierno de España, que han evitado que ahora se esté hablando de "una catástrofe".
Lambán ha destacado el papel del Gobierno de Aragón y el de España, a través de la Confederación Hidrográfica del Ebro, para realizar inversiones importantes en la limpieza del cauce gracias a las que esta avenida, que "pintaba francamente mal hace 48 horas", se haya podido solventar de manera "bastante tranquilizadora".
PINA DE EBRO, PRÓXIMO OBJETIVO
Desde Zaragoza, la punta de la crecida se aproxima a las localidades de la Ribera Baja. Pina de Ebro, adonde se ha trasladado esta tarde la sede del Centro de Coordinación Operativa Integrada (CECOPI), será este miércoles el epicentro de la riada y en los alrededores del municipio se ha desplegado ya un dispositivo de la CHE para intervenir en las defensas si fuera necesario.
De hecho, voluntarios de Cruz Roja han trasladado a una treintena de vecinos de esta localidad con movilidad reducida a la cercana de Osera de Ebro, y la Cruz Roja ha habilitado, en previsión de mayores problemas, un albergue en el pabellón de Bujaraloz. Las personas dependientes que fueron evacuadas de Novillas, Boquiñeni y Pradilla, en la Ribera Alta, ya han regresado a sus casas.
Además, la Confederación Hidrográfica del Ebro ha construido un cordón de seguridad complementario en el Burgo de Ebro, también aguas abajo de Zaragoza, para la defensa del casco urbano, y ha facilitado material al ayuntamiento de este municipio para el refuerzo del dique principal.
La línea férrea convencional entre Fuentes de Ebro y Quinto de Ebro, también en la Ribera Baja, ha quedado cortada por la riada.
NAVARRA DESACTIVA LA ALERTA
Mientras, en Navarra se ha desactivado la alerta del Plan Especial de Emergencia por Inundaciones, lo que da paso a la Fase de Recuperación, que se mantendrá hasta el restablecimiento de las condiciones mínimas imprescindibles para un retorno a la normalidad en las zonas afectadas.
En esta comunidad, según la presidenta del gobierno foral, María Chivite, se han visto afectadas unas 12.000 hectáreas de cultivo, a lo que hay que sumar rotura de motas, afecciones en equipamientos como colegios o centros de salud y residencias y daños en infraestructuras.
Hasta Navarra ha viajado también Sánchez, que ha constatado en Buñuel los restos de agua y barro en calles que fueron anegadas y ha escuchado el testimonio de los vecinos sobre afecciones en cultivos, negocios y viviendas.
Después se ha trasladado a Alfaro (La Rioja), junto a la presidenta del Gobierno riojano, Concha Andreu, donde ha agradecido el trabajo de los profesionales involucrados en la mitigación de los daños.
Andreu ha insistido esta mañana en que su Gobierno explora "todas las vías" de ayuda para los municipios afectados y ha hecho un llamamiento a los agricultores para que aseguren las cosechas para estar prevenidos ante estas situaciones.