El Gobierno de Macron ha realizado una consulta popular online para comenzar a regular el mundo de los influencers y dotar a estos "creadores de contenido" de derechos y obligaciones para controlar un negocio que mueve millones de euros en publicidad.
Francia pretende proteger así los derechos y la propiedad intelectual de los influencers, pero también crear unas pautas que permitan vigilar posibles estafas o fraudes a los seguidores de estas cuentas. En España, se calcula que hay más de un millón de influencers entre Instagram, TikTok y Youtube. En Francia lo superan con más de 1,6 millones. Dentro de España, Madrid es la ciudad con más influencers destacados, llegando al 37% del total de creadores de contenido "más top" del país.
Francia ha optado por una consulta pública previa a la redacción de la norma, para que los franceses puedan manifestarse acerca de las medidas a establecer. Por una parte, se dará definición legal al oficio de influencer como creador de contenidos y también al de sus agentes. Así, se establecerán sus derechos y obligaciones respecto a sus seguidores y con las marcas y agencias con las que trabajen.
El ministerio de Economía francés sugiere la idea de crear una marca de reconocimiento o promover la constitución de una "federación profesional". Además, se buscará dotarles de una "guía de buenas prácticas" y una página web dedicada a los creadores de contenidos.