En el mes de septiembre, el problema de la inflación se suma a otro gran conflicto de las familias españolas: la conciliación laboral y familiar. Se trata de una dificultad que lleva a muchas familias a reclamar que exista la posibilidad de que el curso escolar comience el 1 de septiembre.
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Díaz Ayuso, no descarta la idea de estudiar el adelanto del curso escolar, pero ha declarado que no tomará "decisiones precipitadas" y que "hay que hablarlo con la comunidad educativa y con las familias".
Desde el Sindicato de Enseñanza ANPE, de docentes de enseñanza pública, consideran que ahora "sería inviable" porque no daría tiempo a preparar todo el curso académico. El profesor Esteban Serrano declara que en la Comunidad de Madrid "cada año se adelanta más el inicio y dificulta el trabajo previo de los docentes, con el cambio de un ley nueva" y los pocos días que hay "hasta que llegan los alumnos".
Por otro lado, explican que las condiciones climatológicas de España, "diferentes a otros países europeos", nos obligan a hacer un parón durante el verano porque "los centros no están acondicionados para el clima" y porque "son meses en los que se hacen concursos de oposición y cursos de formación".
En España tenemos más días lectivos que en otros países europeos, pero "se concentran las vacaciones en el verano", en lugar de repartirlas de forma más escalonada durante el año. "En España no sería posible por la falta de adaptación de los centros", reitera Esteban. "Además, al adelantar el curso, ayer todavía nos faltaban profesores porque no se han terminado de adjudicar las plazas de las últimas oposiciones".