Fran Rivera ha destacado algunos momentos de su vida, desconocidos para la mayoría del público
El torero ha recordado a su madre, recorrido sus primeros momentos en el mundo del toro, la relación con sus hermanos o los problemas históricos que "arrastra" con Isabel Pantoja
Foto: DIEZ MOMENTOS |Vídeo: Telemadrid
DIEZ MOMENTOS
En el estreno de ‘10 Momentos’, el programa de entrevistas en profundidad conducido por Anne Igartiburu, recorremos la vida del torero Fran Rivera, profesión que heredó de una familia con una larga tradición. Sin embargo, este viaje por los diez momentos claves de su vida no se quedará dentro de la plaza, sino que mostraran de su lado más humano como padre, hermano y marido.
Anne logra emocionar en repetidas ocasiones a Fran mostrándole imágenes nunca vistas por nuestro protagonista, consiguiendo entrevistar su versión más auténtica, cálida y sin filtros, un lado menos conocido por la presión constante de los medios a la que su familia está acostumbrada a tratar.
Momento 10. Unos padres de revista
En una entrevista de 1977, Fran rememora a unos jóvenes Francisco Rivera “Paquirri” y Carmen Ordóñez. Por aquel entonces, sus padres ya esperaban a su primer hijo. “Había visto esta entrevista, pero cada vez que la vuelvo a ver, me llega”, y añade: “Tengo más recuerdos de mi madre, pero cuando pierdes a tu padre tan pronto (a los 10 años), te agarras más a los pocos que tienes. Me encanta que me hablen de él y de su legado”.
Momento 9. Abrazado a la pierna de su héroe
Siendo familiar de quien es, queremos saber, ¿cómo ha llevado ser hijo de? Fran confiesa que no era consciente a su edad de quién era, para él era solo su padre. “Tengo suerte de haber nacido donde he nacido”. Mirando a una foto suya de pequeño y abrazado a su padre, reconoce que cuando busca un recuerdo donde se sienta seguro “es ahí, agarrado a la pierna de mi padre”.
Sin embargo, es con una entrevista de la ‘Tata’ de la familia, Elena Linaza, con la que Rivera acaba visiblemente emocionado: “Era mágica, entregó su vida por mi familia. De hecho, la única foto que tengo en mi mesilla de noche es de ella”. Las palabras de Elena, sobre la crianza de un pequeño Rivera, demuestran que Francisco tuvo dos madres.
Momento 8. La primera corrida
Recuperamos un vídeo donde Fran aprendía a torear su primera becerra con su abuelo a los 12 años: “Su voz me ha resonado tantas tardes en la plaza, tuvo que ejercer de abuelo, padre y maestro. Aunque didácticamente era pésimo”. Anne le pregunta por una anécdota que tuvo con el escritor Orson Welles: “mi madre me contaba que los dos se sentaban con una botella de vino y hablaban en inglés y español durante horas, y ella no entendía por qué se reían”.
Este octavo momento también está dedicado a su hermano, Cayetano Rivera, y a su lugar de nacimiento en Andalucía, Ronda.
Momento 7. Mamá, soy novillero
Fran Rivera, con 17 años, ya tuvo su primera experiencia en la plaza toreando ante el público. Los medios le entrevistan tras su actuación y, viéndose, recuerda que fue un peso muy grande el tener el espacio lleno de espectadores. Su madre, tras la tragedia de Paquirri, le esperabas siempre fuera. “Nunca vino a verme torear, era terrible para ella”, confiesa Fran.
Momento 6. Una boda casi real
Un momento dedicado a su primera boda con Eugenia Martínez de Irujo, que contaba con casi 1500 invitados. “Quedamos muy poquitos casados desde entonces”, comenta entre risas Fran. Anne retransmitía por entonces el evento como periodista y recuerda: "Lo hemos dicho siempre, fue una boda a la altura de una real". Fran cuenta que su madre sabía que eran muy jóvenes, hasta el punto que la noche anterior a la boda le dijo en privado: “Esto no va a funcionar, cógete un coche, vete y no te cases”.
Momento 5. Montando a caballo con papá
La hija de Fran, Cayetana, le prepara un vídeo sorpresa en este momento para recordar con cariño cuando, en los paseos a caballo con su padre, se quedaba dormida en su pecho. "Dormía con sus botas de montar en la mesilla de noche", recuerda con una sonrisa su padre. “Cuando me separé y se murió mi madre, quien me sacó de esa oscuridad fue ella”.
Momento 4. Toreando con Kiko
Un momento agradable cuando Kiko Rivera tuvo su primera experiencia toreando con sus hermanos, Francisco y Cayetano. "Una vida taurina cortita, pero intensa", comenta entre risas Fran, pero con la confianza que tiene con él añade: "Aunque tengamos vidas muy distintas, cuando nos necesitamos estamos”. Fran valora mucho a su hermano quien, a pesar de que los "espejos" con los que se educó "no son los mejores", es una gran persona.
Anne aprovecha esta mención indirecta a Isabel Pantoja para preguntarle: "¿Tienes fuerza de reclamar lo que te corresponde?". Entristecido, Fran responde: "Lo que no tengo es posibilidad, ha prescrito, judicialmente es imposible. Y no voy a llevar a mi hermano a un juzgado”. Según dice, lo que le importa es "que se sepa quién es cada uno", afirmando que "quien priva de recuerdos de un padre, esa persona no quería a ese padre”.
“Vi a mi madre sufrir por no haber sido capaz de conseguir esas cosas para nosotros", cuenta apenado. "Lo peor de todo es que no las han cuidado”. Según cuenta Fran, muchas personas, pero concretamente el Mayoral de Cantora, le contó que Isabel dijo que "antes de que lo cojan los niños, lo quemo". "Hay que tener un corazón muy negro”, sentencia Fran.
Momento 3. Capotazo a la muerte
Uno de los momentos más oscuros de Francisco Rivera. Tuvo que ser intervenido de urgencia por una embestida en el bajo abdomen: “Cuando recuperé la conciencia pensé que casi no veo nacer a mi hija”, quien nacía una semana después. “Es el precio que pagamos los toreros por nuestro sueño, la sangre”. El momento era crítico en todos los sentidos: mientras él estaba en la UCI deseando que saliese adelante, su mujer estaba a punto de dar a luz. "Tuve mucha suerte”, confiesa, pero reconoce que no fue motivo para que se le pasase la idea de dejar de torear.
Momento 2. Adiós a “La Divina”
Fue en 2004 cuando Fran perdía a su madre, Carmina Ordóñez. “La verdad es que desde que se fue el mundo es mucho peor”, cuenta. Pero a pesar de la amargura de este momento, Fran ha conseguido sobreponerse para poder recordar lo mejor de su vida y, más aún, cuando ve a su madre en una entrevista hablar tan bien y "mal" de su hijo "favorito".
Momento 1. La pedida
El último momento tenía que ser el más especial. Y es que está dedicado a su romance, matrimonio y familia con su actual mujer, Lourdes Montes. Fran rememora con fuerza la última vez que toreo, porque al volver a casa, Lourdes le recibió con un ultimátum. Después de su fatídico accidente ella no soportaba verle torear, y a él le costaba dejarlo. Sin embargo, sobre su hijo cuenta: “Me veo reflejado cuando torea, pero no me gustaría que fuera torero”.