El circuito de Indianápolis se construyó en 1911 y desde entonces se celebran en él las carreras de coches más importantes de Estados Unidos, y unas de las más famosas del mundo: Las quinientas millas de Indianápolis.
Cerca de medio millón de personas de todo el mundo acuden cada año a presenciar las carreras. Los más afortunados tienen una zona especialmente reservada para ellos. En la torre de control conocida como La Pagoda podemos encontrar actores como Jack Nicholson o Michael Douglas.
El circuito se construyó como una pista de pruebas de automóviles. Actualmente pertenece a una familia que lo adquirió en 1945, cuando estaba en plena decadencia, por algo menos de medio millón de euros y se calcula que cada carrera genera alrededor de 300 millones de euros para la ciudad.
Los pilotos tienen que dar doscientas vueltas al circuito para recorrer las quinientas millas (unos 800 km) en aproximadamente unas tres horas y media. El campeón se embolsará dos millones y medio de dólares y un trofeo grabado con su rostro.
Por ocho dólares se puede visitar el museo donde se encuentra el trofeo con las 99 caras de los ganadores y una importante colección de coches de carreras.